viernes, 20 de junio de 2014

Estreno de la película "El cielo es real"

EL” CIELO” SE CUELA EN LA GRAN PANTALLA
Ayer, 19 de junio se estrenó en las salas de cine españolas.

el cielo es real




 
Hay historias que tocan el corazón y otras que tocan el alma. Y luego hay historias que van más allá, porque transforman vidas. Es el caso de EL CIELO ES REAL.
 
Colton es un niño real, que cuando tenía 4 años, murió y volvió a la vida en cuestión de pocos minutos. Pero lo más curioso es que en su día a día normal, comenzó a contar con TOTAL NATURALIDAD y SENCILLEZ que visitó el Cielo.
 
Os podríamos dar datos de esta historia: 6 millones de libros vendidos, 9 millones de espectadores en cine en apenas un mes (habéis leído bien: 9.000.000!!)… ¿cómo es posible que una historia tan sencilla y contada por un niño esté traspasando las fronteras  geográficas y sobre todo…las racionales?
 
No hay artificio, no hay paisajes espectaculares, sólo un niño que dice contar que cuando murió conoció a Jesús y también a otras personas que él no sabía que existían pero que le recibieron en el Cielo.
 
Echad un vistazo al tráiler:
 


EL CIELO ES REAL se estrenó por fin ayer, 19 de JUNIO, EN CINES DE TODA ESPAÑA.
Como el mismo Colton, es una película sencilla, auténtica y sin artificio. Basada en el libro que escribió su padre (Todd Burpo)  contando cada una de esas conversaciones con su hijo. Primero desde el escepticismo y después, desde la certeza.
 
EL CIELO ES REAL habla de la Fe, de la fuerza de la oración, de las dudas , de un abrir de miras y de la grandiosidad en lo más pequeño. Y como nosotros también somos pequeños, y limitados, os escribimos esta carta. Para pediros que nos ayudéis a difundir este mensaje.
 

Palabras del Papa Francisco a las Cofradías y Hermandades.

Lo que es y lo que debe ser la Piedad Popular según el Papa Francisco, en 20 frases
Autenticidad evangélica, eclesialidad, ardor misionero
De la homilía del Papa Francisco en la celebración del Año de la Fe en la plaza de San Pedro de Roma de las Cofradías y Hermandades, domingo 5 de mayo de 2013
 

1.- Las Cofradías y las Hermandades son una realidad tradicional en la Iglesia que ha vivido en los últimos tiempos una renovación y un redescubrimiento.
Evangelicidad: autenticidad de vida desde el Evangelio
2.- La piedad popular es un tesoro que tiene la Iglesia, espacio de encuentro con Jesucristo.
3.- Para conservar, cultivar y acrecentar este tesoro, es preciso acudir siempre a Cristo, fuente inagotable.
4.- Los miembros de las cofradías y hermandades han de esforzarse en reforzar su fe, cuidando la formación espiritual, la oración personal y comunitaria, la liturgia.
5.- A lo largo de los siglos, las Hermandades han sido fragua de santidad de muchos que han vivido con sencillez una relación intensa con el Señor. Es necesario, pues, seguir caminando con decisión hacia la santidad, no conformándose con una vida cristiana mediocre.
6.- La pertenencia a cofradías y hermandades ha de ser un estímulo para amar más a Jesucristo.
7.- Pertenecer a una cofradía o hermandad es, ha de ser, una ocasión providencial paracomprender mejor qué es lo esencial, es decir, creer en Jesucristo, muerto y resucitado por nuestros pecados, y amarse unos a otros como Él nos ha amado.
Eclesialidad
8.- Y las dificultades de la vida humana y cristiana no se superaron fuera, sino dentro de la Iglesia.
9.- La piedad popular es una senda que lleva a lo esencial si se vive en la Iglesia, en comunión profunda con sus Pastores.
10.- La Iglesia quiere a las cofradías y hermandades y les llama a ser presencia activa en la comunidad, como células vivas, piedras vivas.
11.- Pertenecer a una cofradía o hermandad es una manera legítima de vivir la fe, un modo de sentirse parte de la Iglesia, de modo que sus miembros han de aman a la Iglesia y dejarse guiar por ella.
12.-En las parroquias, en las diócesis, las cofradías y hermandades han de ser unverdadero pulmón de fe y de vida cristiana, que, con variedad de colores y de signos, expresión misma de la Iglesia, han de confluir, se han de reconducir a la unidad, al encuentro con Cristo.
Misionariedad: ardor misionero
13.-Misión específica de las cofradías y hermandades, misión importante, esmantener viva la relación entre la fe y las culturas de los pueblos a los que pertenecen. Cuando, por ejemplo, llevan en procesión el crucifijo con tanta veneración y tanto amor al Señor, no hacen únicamente un gesto externo; indican la centralidad del Misterio Pascual del Señor, de su Pasión, Muerte y Resurrección, que nos ha redimido; e indican, primero a los cofrades y también a la comunidad, que es necesario seguir a Cristo en el camino concreto de la vida para que nos transforme. Del mismo modo, cuando manifiestan la profunda devoción a la Virgen María, señalan al más alto logro de la existencia cristiana, a Aquella que por su fe y su obediencia a la voluntad de Dios, así como por la meditación de las palabras y las obras de Jesús, es la perfecta discípula del Señor (cf. Lumen gentium, 53).
14.- Esta fe, que nace de la escucha de la Palabra de Dios,  las cofradías y hermandades la manifiestan en formas que incluyen los sentidos, los afectos, los símbolos de las diferentes culturas… Y, haciéndolo así, ayudan a transmitirla a la gente, especialmente a los sencillos, a los que Jesús llama en el Evangelio «los pequeños».
15.- El caminar juntos hacia los santuarios y el participar en otras manifestaciones de la piedad popular, también llevando a los hijos o invitando a otros, es en sí mismo un gesto evangelizador.
16.- Los miembros de las cofradías y hermandades han de ser, pues, auténticos evangelizadores. Que sus iniciativas sean «puentes», senderos para llevar a Cristo, para caminar con Él.
17.- Y, con este espíritu, estén siempre atentos a la caridad.
18.- Cada cristiano y cada comunidad es misionera en la medida en que lleva y vive el Evangelio, y da testimonio del amor de Dios por todos, especialmente por quien se encuentra en dificultad.
19.- Los miembros de las cofradías y hermandades han ser misioneros del amor y de la ternura de Dios.
20- Y así caminaremos hacia la meta de nuestra peregrinación terrena, hacia la Jerusalén del cielo. Allí ya no hay ningún templo: Dios mismo y el Cordero son su templo; y la luz del sol y la luna ceden su puesto a la gloria del Altísimo. Que así sea.
 

miércoles, 4 de junio de 2014

La Casa Real y nuestra hermandad

        Tras el anuncio del pasado lunes 2 de junio efectuado por S.M. el Rey D. Juan Carlos I, indicando su intención de abdicar la Corona de España en favor de su hijo S.A.R. el Príncipe de Asturias D. Felipe de Borbón y Grecia, el cual recibirá la Corona probablemente el día 18 de junio, la Real Venerable e Ilustre hermandad Servita de Nuestra Señora de los Dolores y el Santísimo Cristo de la Clemencia, quiere mostrar su agradecimiento por el compromiso y fidelidad a la Constitución y a este país que S.M. el Rey D. Juan Carlos ha mostrado durante sus 39 años al frente de la Jefatura del Estado.
 
        Desde estas líneas queremos destacar la vinculación que la Casa Real ha tenido con nuestra casa, ya que en septiembre de 1862, recibió la visita de S.M. la Reina Doña Isabel II acompañada de sus hijos. En marzo de 1910, S.M. el Rey D. Alfonso XIII, acepta el cargo de Hermano Mayor Honorario de nuestra hermandad, autorizando en marzo de 1925, el anteponer en lo sucesivo la Corona Real, en las insignias y membretes de su uso. Señalar también otros actos importantes como la visita en 1964, año previo a la Coronación Canónica de nuestra señora, y en el año 1970, acudiendo bajo el título de SS.AA.RR. los Príncipes de Asturias Don Juan Carlos y Doña Sofía. Por último, no podemos olvidar a otros miembros de la Casa Real que también nos visitaron, como son: S.A.R. la Infanta Doña Isabel de Borbón y Borbón,  S.A.R. Condesa de Barcelona María de las Mercedes de Borbón-Dos Sicilias y Orleans y S.A.R. la Infanta Doña Elena de Borbón y Grecia.

        Para terminar, queremos pedir a Nuestra Señora de los Dolores y al Santísimo Cristo de la Clemencia, que interceda y proteja a saliente Rey de España, S.M. D. Juan Carlos I, así como a su sucesor, S.A.R. el Prícipe de Asturias D. Felipe de Borbón y Grecia, que reinará bajo el nombre de Felipe VI.
 
 Recibid un cordial saludo en nuestros sagrados titulares.
 

Fotografía procedente de archivo de la hermandad:
Año 1964. Visita y ofrenda floral de Don Juan Carlos y Doña Sofía a Ntra. Sra. de los Dolores, en el año previo a su Coronación Canónica.




Fotografía procedente de archivo de la hermandad:
1970. Sus Altezas Reales los Príncipes de Asturias vuelven a visitar a Ntra. Sra. de los Dolores.
Imagen de éstos en el camarín de la Señora.

  Fuente: Archivo de la hermandad.