domingo, 6 de abril de 2014

Finaliza la obra en el solar de la plaza de Capuchinos

   Resumen explicativo de la condición urbanística de la parcela.
   El pasado viernes quedó firmada la terminación de obra relativa a la edificación de donde salen los pasos procesionales de la Hermandad de Nuestra Señora de los Dolores y del Santísimo Cristo de la Clemencia, obra promovida por el Obispado de Córdoba y financiada por nuestra hermandad, cuyo destino es de uso religioso (venerar a nuestros Sagrados Titulares en su traslado y cuando acaezcan circunstancias meteorológicas adversas, actividades pastorales y de apostolado en sus diversas modalidades). De todos los detalles del proceso seguido se dio detallada cuenta a los hermanos que asistieron al Cabildo General del pasado 30 de marzo. 
 
 
 
   Resumen de condicionantes urbanísticos
 
   La parcela donde se ha edificado está incluida en el Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico de Córdoba y Catálogo, aprobado definitivamente en mayo de 2003, pero pergeñado algunos años antes. Dicho Plan Especial llegó a definir los condicionantes urbanísticos para el lugar en que se halla sita la parcela donde se ha edificado, como es el entorno de la Plaza de Capuchinos. De hecho la parcela quedó catalogada en ese planeamiento, situación inédita en las costumbres de catalogación, solo dedicadas a lo construido con valor patrimonial. La construcción, pues, ha tenido que partir necesaria e ineludiblemente de la total discreción y acomodo en su construcción, tanto en uso como en conformación urbana.
   Está incluida como equipamiento religioso, para el desarrollo de actividades pastorales y de apostolado. La ficha  de actuación del espacio libre AV1 (Plaza de Capuchinos) del Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico también es de aplicación sobre la parcela que nos ocupa en los aspectos de recuperación ambiental.
   La altura de los pasos procesionales, concretamente el del Santísimo Cristo de la Clemencia, hizo inviable la construcción de una segunda planta y la consiguiente tramitación del expediente en las condiciones previstas para los Edificios Singulares (art. 36 PEPCH),  ya que se trata de una parcela con calificación de equipamiento en la que se tuvo que proponer una solución arquitectónica especial, por las características funcionales requeridas, cumpliéndose además con las condiciones de alineación e imagen urbana. Por eso, la edificación tiene una sola altura y la misma se asimila obligatoriamente a la prevista en la ficha de catálogo, de manera que dicha altura es análoga a la del Hospital de San Jacinto en la crujía Oeste, cumpliéndose también la identidad de altura exigida respecto de la galería o crujía Norte con la de la nave corrida del Convento de los Padres Capuchinos, lo que se resuelve con la misma materialidad. Todo ello con estricto cumplimiento a la normativa urbanística vigente.
   La crujía Norte se convierte en galería abierta al patio de entrada, con una estructura adintelada con apoyo intermedio, en evocación de las galerías del patio cordobés. En el lindero este, con vistas a la Plaza de Capuchinos, se ubica un ciprés y una buganvilla.